Los de Daniel Vidal perdieron por la mínima sábado contra un Manresa que jugó siempre al límite del reglamento.
Los grana fueron los claros dominadores de la primera mitad, controlando la posesión y marcando el ritmo del juego frente a un rival que se refugió en campo propio buscando salir siempre con balones largos. Los tarraconenses llegaron con peligro al área contraria y disfrutaron de numerosas ocasiones, tres de ellas muy claras. Javi, con un disparo cruzado y Chiri, en dos ocasiones, estuvieron a punto de hacer subir el 1-0 al marcador pero finalmente fueron los del Bages los que encontraron el premio del gol. En la única ocasión de los visitantes en toda la primera mitad el Manresa consiguió el que sería el definitivo 0-1.
En la segunda la dinámica fue la misma, con un Nàstic que buscaba con insistencia y buen juego la portería rival; y un Manresa cerrado y centrado en anular, con excesiva contundencia, los intentos locales de empatar.
Al final del partido el técnico grana, Daniel Vidal, mostraba su impotencia por la derrota. «Hemos sido superiores pero no hemos sabido definir. Nos ha faltado fortuna ya que hemos tenido ocasiones muy claras. Hemos enviado dos balones al palo y hemos llegado con comodidad al área rival. Ellos además han jugado muy intensos y han aprovechado su superioridad física para cortar con contundencia algunas buenas situaciones ofensivas. Creo sinceramente que merecíamos más que el Manresa, pero no ha sido así «.