Los 13.120 espectadores que asistían al partido quedaron desencajados cuando el Racing de Santander conseguía empatar cuando el cronómetro pasaba más de 4 minutos del tiempo reglamentario. El gol marcado por los visitantes en el tiempo añadido dejaba sin premio el esfuerzo realizado por el Nàstic durante todo el encuentro.
Fue el Nàstic el que abría el marcador, gracias a un disparo de David Cuellar que contó con la ayuda involuntaria del portero Calatayud, el cual, se le coló la pelota cuando lo tenía todo de cara para detenerla.
El Racing de Santander sorprendió a los granas justo a inicio de la segunda parte, cuando muchos aficionados aún no habían vuelto a sus asientos. A partir de aquí, el Nàstic cercó con insistencia la portería contraria, hasta que encontró el premio traducido con un precioso gol de cabeza de Portillo.
Y cuando todos pensaban que los tres puntos se quedarían en el Nou Estadi llegó el desengaño. El árbitro había indicado que se añadirían 4 minutos al tiempo reglamentario, un margen suficiente que fue aprovechado por los cántabros. Al igual que el primer gol, obra de Zigic.
El Nàstic entranará el lunes a las 10h y descansará el martes.
