El Gimnàstic de Tarragona disputó ayer miércoles el primer partido de pretemporada en tierras catalanas. Y lo hizo contra su filial, la Pobla de Mafumet, en un ambiente más digno de un entrenamiento que de un partido. Javi López no quiso dar pistas todavía y posicionó dos onces diferentes en el terreno de juego. De inicio jugaron Roberto, Sobregrau, Abraham, Óscar López, Joan Oriol, Abel Buades, David Sánchez, Antonio López, Gil, Pinilla y Edu Oriol. En estos primeros 45 minutos se pudieron ver 2 goles, uno de Gil con el tacón y otro de Edu Oriol a pase de Pinilla justo cuando el reloj pasaba del tiempo reglamentario. En la segunda, fue el turno de Roberto Carrillo, Tortolero, Mingo, Bessone, Rubio, Arpón, Medina, Nano, Campano, Grahn y Gorka de Carlos. En este tiempo la pelota corrió más rápido, y el sevillano Campano obsequió a los presentes con un gran gol de vaselina, el mejor detalle de calidad del partido. Más tarde, Gorka de Carlos demostró su olfato marcando el cuarto y el quinto. Rúben Pérez, que se recupera de su operación, y Sébastien Chabaud, que sufrió una tendinitis a Epe, fueron las únicas bajas del partido.