Un solitario gol de Carmona ha hecho que el Nàstic volviera hoy del Mini sin puntos en el bolsillo. A pesar del control defensivo de los grana en gran parte del partido, esta jugada desafortunada en el minuto 39 ha condenado las aspiraciones tarraconenses.
Aunque el Barça B ha sido el dueño y señor del balón en los primeros 45 minutos, la sensación de igualdad ha sido el valor predomiinant. El filial azulgrana tocaba en la línea de medios pero no creaba peligro con facilidad, mientras el Nàstic esperaba atrás y buscaba aprovechar los resquicios en la zaga local. Los errores con los pies del portero Oire no las han aprovechado ni Luna ni ninguno de los delanteros grana, y las pocas ocasiones de los tarraconenses se han desvanecido sin demasiado peligro.
La seriedad defensiva del Nàstic, se ha visto truncada en la jugada que ha decantado el marcador en los primeros cuarenta y cinco minutos. Un mal despeje dentro del área de los grana le ha aprovechado Carmona para marcar a placer el primer gol de los jóvenes de la pedrera azulgrana. Un gol que ha servido para dar confianza a los locales y ha hecho crecer los nervios entre los del conjunto tarraconense. A pesar de que el Barça se ha estirado en los últimos minutos, el resultado de 1 a 0 se ha mantenido hasta el descanso.
La segunda mitad ha comenzado con un filial azulgrana más lento y con un Nàstic que ha buscado revolucionar el encuentro con la entrada de Moran .Aunque el Nàstic ha mejorado en la línea de tres cuartos, las llegadas no se traducían en peligro y, a la vez, el Barça B se reencontraba y crecía con unos grandes Carmona y Rafinha. Al cuarto de hora, Oliva ha vuelto a mover el banquillo, dando entrada a Tuni y Álvaro Rey. La revolución no ha sido inmediata, pero el partido se ha elecrificat a partir de los 80. En este minuto, concretamente, Juste ha realizado una gran jugada por la derecha, donde pudo haber penalti por unas manos de Muniesa, y el balón acabó en córner. En esta misma jugada, el esférico cayó a Xisco, que ha conectado un disparo potente y ha encontrado Oier. En estos últimos compases los dos equipos han gozado de oportunidades, pero el marcador no se ha movido. Al final, una nueva derrota del Nàstic, que recibirá el próximo domingo el Sabadell en casa.
